Perú, rechazan a Lidia Patty como cónsul de Bolivia en Puno. Canciller de Perú, Ana Cecilia Gervasi, solicitó dejar sin efecto la designación pública de Lidia Patty como cónsul de Bolivia en Puno.
Perú Lidia Patty cónsul Puno
Gobierno de Perú, a través de la canciller Ana Cecilia Gervasi, informó ante la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso que solicitó a Bolivia dejar sin efecto la designación de Lidia Patty como cónsul de su país en Puno. Patty es una exdiputada del Movimiento Al Socialismo (MAS) y allegada a Evo Morales.
Gervasi explicó que este nombramiento es irregular, ya que no cumple con los requisitos para ocupar dicho cargo y porque, además, viene ejerciendo funciones desde el pasado 1 de junio sin contar con credencial de admisión o exequátur, tal como lo exige la Convención de Viena.
“Se tiene evidencia de que ha ejercido funciones consulares desde el 1 de junio, motivo por el cual comunicamos a la Embajada de Bolivia que dicha funcionaria no podía ejercer funciones consulares, porque su designación no ha sido admitida por el Gobierno del Perú”, dijo Gervasi.
Evo Morales
Lidia Patty Mullisaca es una exdiputada del Movimiento Al Socialismo y cercana al expresidente de Bolivia, Evo Morales. Ella se hizo conocida a finales del 2019 por defender a Evo Morales cuando decidió huír del país dejando a Bolivia sin autoridades.
Patty en aquel momento dijo que se había registrado un golpe de Estado, lo cual es evidente que jamás sucedió.
Sin embargo, hace más de dos años ella acusó formalmente de terrorismo a los líderes surgidos en 2019 en Bolivia. Esta demanda condujo al arresto del líder del gobernador de Santa Cruz, Fernando Camacho.
Aymara y quechua
La cónsul bajo polémica, se define en los siguientes términos: «Soy del pueblo Kallawaya que vive en la provincia de Bautista Saavedra, dentro del departamento de La Paz, donde se habla Aymara y Quechua. Mi comunidad es Niño Corin, y somos ricos en arte, medicina, diferentes tipos de música. En prácticamente todas las provincias es muy bonito vivir esta vida».
Y agrega: «Mi padre luchó por la liberación de la esclavitud que era nuestra realidad. Aunque teníamos los más finos tejidos, productos agrícolas, llamas y ganado, todo esto lo producíamos para que los ricos nos lo quitaran. Nos dominaron. Así es como solíamos vivir. Así que de joven me dediqué a tejer nuestra ropa y los aguayos que llevamos a la espalda. Los turistas venían y nos compraban piezas. Mi padre nunca quiso que nos fuéramos a la ciudad. Pensó que nos perderíamos y caeríamos en la ruina. Convencí a mi padre de que estaría a salvo yendo con mi amiga, otra mujer joven. En la ciudad, trabajé como empleada doméstica, durante cinco años. Los patrones apenas nos daban tiempo libre para visitar a nuestras familias y finalmente regresé, para quedarme con mi gente».