Perú en tramo final de las elecciones presidenciales 2021. Las elecciones presidenciales en Perú del 11 de abril dan la oportunidad de elegir nuevos líderes en medio de la pandemia y el tumulto político.
Perú elecciones presidenciales 2021
El 11 de abril, los peruanos votarán por presidente, dos vicepresidentes, los 130 miembros del Congreso unicameral y cinco representantes al Congreso Andino, todos por períodos de cinco años. Si ningún candidato presidencial gana una mayoría absoluta, los dos primeros boletos competirán en una segunda vuelta el 6 de junio.
Más de 25 millones de peruanos serán elegibles para votar este año, de los cuales el 30 por ciento son menores de 30 años. La votación es obligatoria para los adultos de 18 a 70 años en Perú.
Además, la autoridad electoral, conocida como la ONPE, convocará a poco más de medio millón de personas para que se desempeñen como trabajadores electorales. Las multas por no votar oscilan entre 6 y 24 soles, y no presentarse a las tareas del lugar de votación resulta en una multa de 60.
Hasta ahora, las elecciones avanzan según lo programado en medio de la pandemia con algunos ajustes. La ONPE aumentó el número de casillas electorales de los típicos 5.000 a 12.000 para facilitar un mayor distanciamiento social.
El país está muy lejos de alcanzar cualquier tipo de inmunidad colectiva que hiciera más segura la reunión para votar.
La mayoría espera que Yonhy Lescano de Acción Popular gane la primera ronda. Una encuesta de marzo de Ipsos Perú lo mostró ganador, con el 16.8% de los votos emitidos y el 21.0% de los votos válidos (es decir, con los votos en blanco filtrados).
Las tres grandes preguntas son: si el impulso actual de Rafael López Aliaga puede ayudarlo a superar a un George Forsyth en decadencia para llegar a la segunda vuelta, si el 20 al 30% de los votantes que no planean votar por un candidato terminan favoreciendo a uno y si los candidatos menores se retiran antes del día de las elecciones y dan a candidatos como Keiko Fujimori y Verónika Mendoza la oportunidad de intentar conseguir suficientes partidarios nuevos para ponerlos en la segunda vuelta.