Perú, cinco soldados desaparecen al huir de manifestantes. Cinco soldados del ejército de Perú están desaparecidos luego de ingresar a un río para intentar escapar del asedio de manifestantes.
Perú soldados manifestantes
Cinco militares en Perú siguen desaparecidos tras ser arrastrados este domingo por la corriente de un río cuando huían de un grupo de manifestantes antigubernamentales en la sureña región de Puno. En el incidente resultó muerto un militar.
Los soldados formaban parte de una patrulla que se dirigía desde la ciudad de Ilave a Juli -donde los manifestantes habían incendiado el sábado una comisaría- cuando fueron interceptados por un grupo de disidentes violentos que les bloquearon el paso, informó el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas.
En ese escenario, la patrulla decidió tomar una ruta alternativa y cruzar el río Ilave para evitar un enfrentamiento, pero “debido a las dificultades, incluida la corriente del río y ante un ataque de piedras y otros objetos vendidos”, seis miembros de la patrulla fueron arrastrados por el agua.
El soldado fallecido ha sido identificado como el sargento Franz Canazas Cahuaya.
Mientras tanto, otros cinco soldados han sido ingresados en el hospital Ilave debido a la hipotermia y permanecen estables.
Las autoridades militares han puesto en marcha una operación de búsqueda de soldados desaparecidos.
Las fuerzas armadas también han iniciado una investigación para determinar las causas exactas del incidente.
Toma de comisaría
El sábado, una turba de unas 300 personas atacó la comisaría de la vecina ciudad de Juli con piedras y otros objetos durante horas y finalmente la prendieron fuego con cócteles molotov.
Diez policías resultaron heridos en el ataque y tuvieron que ser trasladados en avión como parte del rescate, mientras que siete civiles heridos en el enfrentamiento fueron admitidos en el hospital local.
Otro grupo de manifestantes atacó simultáneamente la base militar de Juli, alojada temporalmente en un hotel, y como resultado 10 militares resultaron heridos con contusiones y cortes en la cabeza y los brazos.
En la región de Puno, que incluye a Juli, los bloqueos de carreteras y el cierre de varias actividades han sido continuados por los lugareños desde enero exigiendo la renuncia de la presidenta Dina Boluarte.
La represión de las protestas por parte de las autoridades desencadenó la violencia en la que murieron 18 personas en la vecina ciudad de Juliaca.
Esta semana una delegación de habitantes de Juliaca visitó Lima para reiterar su demanda de elecciones anticipadas, pero la policía lanzó gases lacrimógenos contra un grupo que incluía a mujeres con niños pequeños, lo que frustró la campaña.
Puno
El gobierno ha declarado estado de emergencia en Puno, donde las responsabilidades de orden público local han sido entregadas a las fuerzas armadas, con la policía nacional bajo mando militar.
Desde diciembre, cuando estallaron las protestas generalizadas tras la detención del expresidente Pedro Castillo tras su intento de disolver el Congreso, al menos 70 personas han muerto en protestas y enfrentamientos.