Pedro Castillo, el hombre que sacudió al Perú

Pedro Castillo, el hombre que sacudió al Perú. Hasta ahora casi desconocido en política, el candidato de la izquierda radical Pedro Castillo, compite con chances reales en las elecciones de nuevo presidente del Perú.

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Lilian Paredes, la esposa de Pedro Castillo, recibe en el patio de la casa familiar, una casa tradicional ubicada en un cerro que domina Chugur, un caserío de cien almas perdidas en medio de los Andes, en la región de Cajamarca, a más de 1.000 kilómetros de Lima.

“Es una casa de campo pequeña, pero muy cálida. Nací y crecí aquí en Chugur y mi esposo está a una hora y media de distancia. Sus padres son agricultores, como el mío», dice. «Como puede ver aquí, cultivamos maíz, papas, guisantes. Y por ahí tenemos a nuestros animales: vacas y gallinas».

Estudiantes con el estómago vacío

Es en este entorno rural y agrícola donde vive Pedro Castillo con su esposa y sus dos hijos. Ambos enseñan en la provincia de Anguia, una de las más pobres de Perú, mientras que la región alberga la mina de oro más grande de América del Sur. Durante años, el maestro ha visto a sus alumnos llegar a la escuela con hambre.

«Mi esposo se dio cuenta que nuestros gobernantes estaban haciendo las cosas mal y él quería cambiar las cosas», dice Lilian Paredes. Empezando por su sector, educación en zonas rurales.

Por lo tanto, Pedro Castillo se involucró por primera vez en la lucha sindical. En 2017, saltó a la fama liderando un vasto movimiento de huelga seguido por más de 200 mil maestros durante casi tres meses para exigir un aumento en el presupuesto de educación.

Pero con pocos resultados, como explica Víctor Cabrera, profesor y viejo amigo de Pedro Castillo: “La educación sigue siendo un sector abandonado. Entonces los profesores nos dijimos a nosotros mismos que si no estuviéramos representados en los altos círculos políticos, eso nunca cambiaría».

Durante una asamblea nacional de representantes docentes, Víctor Cabrera y sus colegas le propusieron a Pedro Castillo ser su candidato presidencial. “Nos había demostrado que podía ser un buen líder: digno, honesto y leal al pueblo, porque a diferencia de los demás, no negoció con el gobierno dinero para interrumpir la huelga”, remarca nuevamente el maestro.

Conservador de izquierda

Abordado por varios partidos para ser su candidato presidencial a fines de 2020, el profesor y sindicalista Pedro Castillo finalmente respondió a la invitación de Perú Libre, un partido marxista-leninista de izquierda.

Si es elegido presidente, Castillo ha prometido convocar una Asamblea Constituyente para redactar una nueva constitución y nacionalizar los recursos naturales de Perú para financiar la educación, la salud y el alivio de la pobreza. A menudo cita como ejemplos las experiencias de Evo Morales, en Bolivia, y Rafael Correa, en Ecuador.

Económicamente izquierdista, este católico, por otro lado, es conservador en cuestiones sociales. En particular, se opone al aborto y al matrimonio para todos, y está a favor de una vigilancia estricta y una fuerte regulación de los medios de comunicación.

Mientras sus opositores lo acusan de ser un comunista que, en caso de triunfo, convertiría al Perú en una segunda Venezuela, una gran parte de la población, sobre todo en las zonas pobres y rurales, se identifica con este maestro provincial de origen humilde que, a diferencia de su oponente, no está asociado con la corrupción.

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