México, esposa del presidente AMLO contra Ralph Lauren. Esposa del presidente de México acusó a la marca Ralph Lauren de plagiar diseños indígenas condenando falso indigenismo.
México Ralph Lauren
“Hola Ralph (Lauren): ya nos dimos cuenta de que te gustan mucho los diseños mexicanos”, dijo la escritora e investigadora Beatriz Gutiérrez en una publicación de Instagram el jueves. “Sin embargo, al copiar estos diseños estás cometiendo plagio, lo cual es ilegal e inmoral”.
Gutiérrez es la esposa del presidente López Obrador.
La publicación muestra una foto de un abrigo con coloridos motivos indígenas colgado en una tienda. La etiqueta dice Ralph Lauren.
La compañía no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios de Reuters, que descubrió que la prenda se vendía en el sitio web de una tienda por departamentos por 360 dólares.
Anteriormente se disculpó por las acusaciones de apropiación cultural en incidentes separados.
“Ojalá reparen el daño a las comunidades originarias que hacen este trabajo con amor y sin fines de lucro”, agregó Gutiérrez, atribuyendo los diseños a las comunidades indígenas de Contla y Saltillo.
El presidente Andrés Manuel López Obrador ha lanzado una intensa campaña para recuperar las reliquias de la herencia precolombina de México desde que asumió el cargo en 2018, incluida la presentación de denuncias contra las casas de subastas en los Estados Unidos y Europa, y la recuperación de decenas de antigüedades mexicanas.
En julio, el gobierno mexicano también le pidió al minorista de moda chino Shein que explicara el uso de elementos indígenas mayas en una de sus piezas, por lo que eliminó la prenda de su sitio web.
Culturas
El gobierno ha presentado quejas similares contra Louis Vuitton de Francia, la diseñadora venezolana Carolina Herrera, Zara de España y el minorista estadounidense Anthopologie.
“Es tanta la diversidad y belleza de las culturas mexicanas, que muchos diseñadores de moda se embelesan”, aseguro Beatriz, agregando que “entiende perfectamente” aunque “su admiración no les da permiso para apropiarse de diseños nacionales y plagiar descaradamente a los textileros llevándose a los bolsillos miles de dólares”.