Luciano Basso levanta casa alrededor de araucaria en sur del Brasil. El arquitecto Luciano Basso ha completado una casa de concreto en los bosques del sur de Brasil, construida alrededor de una araucaria de Paraná.
Luciano Basso casa Brasil
Luciano Basso ha completado una casa de concreto en los bosques del sur de Brasil que está construida alrededor de un pino maduro de Paraná.
El proyecto fue encargado por una pareja joven, que quería una casa que se integrara armoniosamente con la vegetación circundante del área. La casa de 240 metros cuadrados está ubicada en Caxias do Sul, en el estado brasileño de Rio Grande do Sul.
La casa de hormigón se alza sobre un terreno empinado, lo que llevó al arquitecto local Luciano Basso a elevar el proyecto sobre pilotes para evitar perturbar el paisaje. El árbol parece crecer a través de los listones de madera de la terraza y es visible desde la sala de estar y el comedor principal.
Topografía
“Buscando una mínima intervención en la topografía, el volumen principal está sostenido por un pilote que toca delicadamente el suelo y se adapta a la conformación natural del terreno”, dijo el arquitecto.
“Si fuera posible que una enorme grúa levantara la casa y la depositara en otro lugar, el terreno original quedaría prácticamente intacto, sin rastros de la construcción”, agregó.
Los ocupantes estacionan debajo de la estructura y entran a la casa de concreto por un nivel más bajo, que alberga áreas de servicio.
“Si fuera posible que una enorme grúa levantara la casa y la depositara en otro lugar, el terreno original quedaría prácticamente intacto, sin rastros de la construcción”, agregó.
Concreto
Los ocupantes estacionan debajo de la estructura y entran a la casa de concreto por un nivel más bajo, que alberga áreas de servicio.
El único dormitorio de la casa está separado del resto de zonas de estar por una pared de listones de madera, que deja pasar algo de luz.
Las paredes corredizas de vidrio de altura completa se abren a la terraza en la sala de estar y el comedor. La terraza ofrece una generosa sala de estar que se asoma a las copas de los árboles circundantes. Para permitir vistas desde más ángulos, el arquitecto cortó una abertura en el costado de la terraza, que también forma un banco.