Jaime Quito, parlamentario de Perú Libre en trance psicodélico. Parlamentario Jaime Quito afirmó que la oposición de derecha exige más cambios en el gabinete y apunta a la destitución del presidente Pedro Castillo.
Jaime Quito Perú Libre
El populismo en América Latina siembra mentiras recogiendo, a veces, tempestades. En sintonía, el Perú actual no podía quedar de lado de estas prácticas ya verificadas en toda la región.
Jaime Quito, perteneciente al gobernante Partido Perú Libre (PPL), señaló que la destitución de Castillo es el objetivo del Congreso, en el que los partidos de derecha tienen mayoría y los que tienen posiciones extremas están tomando la iniciativa.
Se refirió a la salida del ex canciller de Castillo, Héctor Béjar, que ni siquiera duró un mes en la nueva administración.
«El problema no fue Béjar, el problema de los sectores de oposición es el Gobierno», y ya hay dos mociones que allanan el camino al juicio político del presidente.
El diputado oficialista señaló que uno de los proyectos, del grupo neoliberal Avanza País, propone declarar el nombramiento del gabinete ministerial como un ‘acto inmoral’.
Eso daría pie en el momento oportuno a deponer al presidente por ‘incapacidad moral permanente’, una vaga motivación que puede ser invocada por el Parlamento para destituir a un gobernador, según la Constitución vigente.
‘Exijo a la oposición que deje trabajar a este Gobierno’, que ni siquiera se instala desde hace tres semanas, reclamó Quito, comentando que los opositores también deben abstenerse de someter a los ministros a indagatorias que pueden terminar en censuras (virtual destitución).
Ese recurso fue anunciado por el exjefe de Marina Jorge Montoya, representante del partido de extrema derecha Renovación Popular (RP), que busca ‘limpiar el gabinete de ministros indeseables’.
Quito ignora en su análisis que el gobierno de Castillo asumió en la fragilidad de una elección más que reñida, en la cual el país está dividido literalmente en dos partes.