Industria de música, los mejores días están llegando

Industria de música, los mejores días están llegando. La industria de la música está lista para entrar en un período de crecimiento que empequeñecerá las ganancias, si no los excesos, del pasado.

Industria música

Mercuriadis, de 59 años, es un hombre de la música hasta su característico Prada negro. Solía administrar a Elton John, Beyoncé y Guns & Roses. Pero eso fue en los viejos tiempos cuando las compañías discográficas sacaban primero vinilos, luego CDs, que tenían un margen de ganancia tan alto que los ejecutivos se levantaban para trabajar a la hora del almuerzo, se dirigían al Groucho Club a las 6 p.m. con sueldos de seis o siete cifras.

Los servicios de transmisión, al principio ilegales, anularon ese estilo de vida y amenazaron con acabar con toda la industria. Los ingresos cayeron tan bruscamente que algunos grandes nombres casi colapsaron, en particular EMI.

Mercuriadis cree que la disrupción tecnológica ha terminado y que la industria de la música está lista para entrar en un período de crecimiento que empequeñecerá las ganancias, si no los excesos, del pasado.

“La industria de la música tiene sus mejores días por delante. Incluso hace siete años no habría dicho eso”. ¿La razón? La música se está convirtiendo en “una clase de activos”, dice.

Hipgnosis, la empresa que fundó y dirige, ha gastado más de 2.000 millones de libras esterlinas en la compra de catálogos de artistas desde Red Hot Chili Peppers hasta Rick James, pasando por Neil Young y Nile Rogers. Unas 60.000 canciones valoradas en unos 2.200 millones de libras esterlinas se encuentran en el Hipgnosis Songs Fund.

Las canciones de otros artistas que valen cientos de millones de libras más se mantienen en fondos separados de Hipgnosis.

Ingresos

Él y los artistas se benefician de los ingresos por transmisión de cada canción, que aumentan a medida que los servicios se expanden en los mercados desarrollados y surgen nuevos transmisores en nuevas áreas de rápido crecimiento, especialmente en África.

“Pasamos de 30 millones de suscriptores pagos o transmisores de música en todo el mundo cuando comenzamos Hipgnosis, hace cinco años, a 600 millones ahora. Esa cifra aumentará hasta dos mil millones en la próxima década”, detalla.

La música significa más en la vida cotidiana del británico promedio que en cualquier otro lugar. Radio 1 y Radio 2 reproducen música nueva constantemente. Todavía hay prensa musical, además de cinco o seis programas de televisión en los que verás artistas, ya sea Graham Norton o Jonathan Ross. Y tienes Glastonbury, Reading, Leeds, Latitude, Love Supreme”.

Patrocinadores

Hipgnosis tuvo un buen comienzo. Mercuriadis atrajo a algunos patrocinadores de primer orden. Blackstone, la empresa de gestión de inversiones de EE. UU., invirtió 1.000 millones de dólares, atraída por la perspectiva de un flujo constante de ingresos a partir de canciones icónicas. Grandes artistas querían ingresar a los fondos de Hipgnosis, incluidos Blondie, Leonard Cohen, Nelly Furtado, Justin Timberlake, Justin Bieber y Dave Stewart.

Sin embargo, ha sido difícil recientemente. El valor de las acciones de Hipgnosis Songs Fund, el grupo que cotiza en el Reino Unido, se ha reducido casi a la mitad en los últimos dos años, ya que la incertidumbre global y el aumento de las tasas de interés han mermado la confianza en la mayoría de las empresas, incluido el entretenimiento.

Hipgnosis Songs Fund ahora tiene una capitalización de mercado de alrededor de £892 millones. Eso es la mitad de su valor liquidativo. Ya no puede comprar los derechos de nuevas canciones porque el precio de las acciones con grandes descuentos le impide recaudar capital para financiar las compras sin diluir las participaciones de los accionistas existentes.

Mercuriadis sufrió un revés de alto perfil recientemente cuando Rod Stewart lo rechazó. Stewart dijo: “Ha quedado muy claro que esta no era la compañía adecuada para administrar mi catálogo de canciones, carrera o legado”.

Solo una táctica de negociación, insiste Mercuriadis. Varios ejecutivos de alto perfil han dejado la empresa en los últimos 12 meses. “Soy una persona exigente y este nuevo modelo de gestión de canciones no es para todo el mundo”, explica.

¿Sigue confiando en que puede demostrar que los mejores días de la industria de la música están por venir?

“Creemos que obtendremos el mandato para continuar”, dice.

Agrega que los ingresos de transmisión de la empresa están creciendo rápidamente y el negocio de colocar canciones de Hipgnosis en programas de televisión y películas aumenta 25 por ciento cada  año. “Dentro de diez años nuestros activos valdrán dos o tres veces lo que valen hoy. La música no se detendrá pronto”. O, como diría uno de sus artistas, Journey: No dejes de creer.

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