Guillermo Lasso, el nuevo líder de un Ecuador urgente. Luego de derrotar a su rival de izquierda Andrés Arauz, Guillermo Lasso asume el cargo en medio de una de las peores crisis económicas que haya enfrentado Ecuador.
Guillermo Lasso Ecuador
Guillermo Lasso tomará juramento como presidente de Ecuador en breve. El ex banquero de 65 años derrotó a Andrés Arauz, mientras se ha comprometido a atraer más inversiones al sector petrolero y reactivar la economía estancada.
La terrible experiencia del Covid en Ecuador atrajo la atención internacional en 2020, cuando hubo informes de cadáveres abandonados en las calles de la ciudad más poblada, Guayaquil.
Con una población de 17,3 millones, la nación ha tenido más de 415.000 casos acumulados de coronavirus y las muertes han superado las 20.000.
La vacunación contra Covid-19 se ha estado moviendo con una lentitud dolorosa (solo un 2,3% de la población ha sido completamente vacunada) por lo que acelerar esto requerirá un gran esfuerzo.
Para tratar de mantener su promesa de vacunar a nueve millones de ecuatorianos durante sus primeros 100 días, Lasso anunció que mantendría conversaciones bilaterales urgentes con Rusia, China, Estados Unidos, la Unión Europea y Chile.
Lasso dijo que ya había hablado con el presidente de Chile, Sebastián Piñera, sobre la obtención de préstamos para comprar vacunas con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo.
También ha anunciado una alianza con el Consejo Nacional Electoral de Ecuador para utilizar la información contenida en su padrón y sitios de votación para agilizar el proceso de vacunación.
Durante su campaña electoral, Lasso dijo que un plan nacional de vacunación exitoso sería la clave para reactivar la estancada economía de Ecuador.
La pandemia de coronavirus ha tenido un impacto devastador: el país ha entrado en recesión, con un aumento de la pobreza y el desempleo.
El sistema de salud no ha escapado a los efectos corrosivos de la corrupción, con informes de fondos destinados a abordar la pandemia de Covid que están siendo mal manejados por funcionarios de todos los niveles de gobierno.
El país se encuentra actualmente en su sexto ministro de salud en cuatro años, después que varios renunciaron en medio de escándalos relacionados con el coronavirus.