Bolivia, protestas callejeras paralizan el país. Durante los últimos dos meses Bolivia lucha con protestas callejeras ante gran malestar debido a disputa de poder entre sus principales políticos.
Bolivia protestas callejeras
Ecuador, Perú, Colombia y ahora Bolivia, las protestas callejeras paralizan a otra nación en Sudamérica. Durante los últimos dos meses, Bolivia ha estado lidiando con un gran malestar político que surgió de la lucha de poder entre los principales políticos del país.
Sin embargo, en el centro de las protestas se encuentra el descontento público y el resentimiento por el estado de cosas, la misma ira provocó enfrentamientos en otras naciones latinoamericanas.
Las manifestaciones y los enfrentamientos violentos han azotado a Bolivia durante más de dos meses. Sin embargo, no es la única nación latinoamericana donde la gente ha salido a las calles para expresar su descontento con el régimen gobernante. El año 2024 vio múltiples protestas de este tipo en la región, algunas se desencadenaron como respuesta a un evento actual, otras se basaron en problemas que se remontan mucho tiempo atrás.
En lo que respecta a Bolivia, en el centro del problema están las grietas emergentes dentro del Movimiento al Socialismo, o MAS, un partido de izquierda que ha dominado el panorama político del país durante dos décadas. La principal disputa política es entre el presidente de Bolivia, Luis Arce, y su antiguo mentor, el expresidente Evo Morales.
Ambos luchan no solo por el liderazgo del partido, sino también por el candidato a las próximas elecciones presidenciales, que están programadas para el próximo año. Sin embargo, los enfrentamientos reflejan el pronunciado declive de la influencia de la izquierda en el país. ¿Es esta una tendencia común en otras naciones latinoamericanas?
Bolivia política
¿Qué está pasando en Bolivia? Morales saltó a la fama en el país en 2006. Era conocido por priorizar a las poblaciones indígenas y rurales del país y era popular por sacar a cientos de miles de personas de la pobreza.
Si bien fue el primer presidente indígena de Bolivia, Morales fue criticado por perseguir a los opositores, acosar a los periodistas y manipular el poder judicial a su favor.
En 2019, huyó del país tras unas elecciones controvertidas en las que Morales fue acusado de cometer fraude. Finalmente, eligió a Arce, su entonces ministro de finanzas y protegido, para que se presentara como candidato en 2020.
Después de que Arce ganara las elecciones, ignoró a Morales y decidió gobernar el país en sus propios términos. Si bien Morales regresó al país el día en que Arce prestó juramento, se produjo un nuevo tipo de lucha de poder entre los dos líderes.
En medio del caos, el ex líder boliviano también enfrenta la posibilidad de ser encarcelado luego de que los fiscales en octubre lo acusaran de violación legal, acusándolo de embarazar a una niña de 15 años en 2016 cuando estaba en el poder. Morales negó las acusaciones y calificó el caso de «motivado políticamente». Esto llevó a frecuentes enfrentamientos entre los partidarios de los dos líderes.
Sin embargo, la lucha de poder entre los dos políticos no es la única razón detrás de la crisis actual en el país. La escasez de combustible, el aumento de los precios y la falta de acceso a los dólares estadounidenses y los bienes importados también han provocado furia entre el público en general. Con la caída de los precios y la lenta producción, la administración de Arce luchó para importar combustible.
Muchos en Bolivia argumentaron que la agitación política en curso está obstaculizando cualquier progreso significativo para abordar la crisis económica. Algunos también expresaron su descontento por el estado deplorable del sistema de justicia del país, que se está utilizando como arma para perseguir a los enemigos políticos.
Un descontento público similar también provocó protestas y enfrentamientos en otros países latinoamericanos, lo que refleja la inestabilidad política que se ha vuelto la región a lo largo de los años.